Hay una madre que siempre vela por nosotros, una mirada que nunca duerme, un corazón de bronce que nos cuida, nos arropa y nos protege bajo el cielo de Sevilla.
Amanece un nuevo día y nuestro “ángel guardián” rompe su silencio... ¡Sevillanos! Nuestro emblema tiene algo que decirnos, ¿te lo vas a perder?